
Llega un momento en el que te cansas, te cansas de luchar, de pensar que tus sueños se harán realidad, de que tu vida mejorara…
Llega un momento en el que te tomas unos cuantos tragos más de vodka, en el que oyes algo que te hiere, en el que empiezas a llorar y ya no paras. Porque llevas mucho tiempo guardándolo todo, y lo único que quieres es llorar, desahogarte, insultar…
Yo los quería a ellos aquí, a los que me prometieron que jamas me abandonarían, y lo han hecho, quería mi vida de vuelta, quería ser la misma de hace un año, pero me he dado cuenta de que no era posible, de que la vida sigue, sus vidas siguen y yo me he quedado atrás, sola, estancada en medio de un montón de recuerdos.
Soy la típica persona, que a veces necesita que un amigo en concreto venga y me diga que todo saldrá bien, que me abrace y que diga que me quiere y siempre estará ahí. Soy como una niña pequeña, siempre necesito a alguien… Y los necesitaba a ellos, y lo necesitaba a él, necesitaba al chico al que quiero a mi lado, aunque el no me quiera, necesitaba a mis amigos, esos que ya no tienen tiempo para mi, necesitaba un:
- Tranquila pequeña, todo saldrá bien.


